15 de enero de 2025. Colonia Xoco, Ciudad de México.

– ¿Aún sientes que tienes la rodilla operada? – Me preguntó el doctor.

– Pues…sí, de hecho evito dar pasos más largos, terrenos irregulares y movimientos no tan naturales. Cuando me baño, le doy la espalda a las llaves, para tomar el shampoo o el jabón no tuerzo el tronco ni giro las rodillas, prefiero dar la vuelta completa para tomar cualquier cosa. Cuando cruzo la calle y hay un desnivel, un charco o algo que obstruya, en lugar de dar un salto, el paso más largo o cruzar a través, prefiero dar la vuelta. – Fue la sobre explicación no solicitada que le respondí al doctor.

– Eso, aún eres muy consciente que estás operado. Tenemos que lograr que no lo pienses tanto y que comiences a caminar, a hacer ejercicio y a hacer tu vida sin que te des cuenta que te operaste, mejorar tu propiocepción. – Dijo el doctor Salinas con toda la calma del mundo, casi aburrido de tener a otro paciente que no está del todo bien pero que no está para nada mal. Un paciente que parece desesperado por volver a su vida cotidiana de antes de la lesión pero que tampoco está ahí del todo, sin dar el cien por ciento para tener el alta médica desde ya.

La propiocepción es la capacidad que tenemos de darnos cuenta sobre nuestro propio cuerpo; volumen, velocidad, elasticidad, movilidad y demás virtudes que podemos desarrollar como seres humanos. Es la autoconsciencia del cuerpo, de la carne, de los músculos y los huesos; es la propia medición, el cálculo de cada movimiento tanto fino como amplio, el reconocer las capacidades físicas de las que somos capaces. Los límites a donde podemos llegar.

Recuerdo hace trece años las cirugías de las rodillas, la recuperación y cómo esa propiocepción llegó sola, sin explicaciones de por medio. El movimiento, la fuerza, la elasticidad y el rango de movimiento llegaron por su propia cuenta después de la fisioterapia y la puesta a punto físico. Habrá que realizar lo mismo en esta ocasión con sus debidas diferencias: lesión diferente (pero en la misma zona), ciudad distinta, otra fisioterapeuta, doctor más presente; mayor edad, más peso, otros temas de salud y otro tipo de pensamientos. La propiocepción del cuerpo y la de la mente son igual de necesarias.

Pronto habrá más contenido en distintos formatos. Sigan al pendiente.

Deja un comentario

La chamba

Este blog personal también tiene la función de portafolio, muestra de trabajo en redacción, escritura, reseñas, críticas y demás. Así que siéntase libre de contactar para cualquier tema profesional.

Volver al inicio

Últimas Entradas